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Es sumamente imprescindible contar con un rostro totalmente hidratado y tonificado, para evitar cualquier tipo de inconvenientes. Como lo pueden ser los granitos, puntos negros, espinillas o también, tener nuestra piel con alto contenido graso y hasta incluso evitar la resequedad del mismo.
Para ello, es fundamental saber cómo hidratar nuestro cutis correctamente. La forma más básica es mediante la utilización de cremas hidratantes, pero existen otros métodos que pueden llegar a ser muy efectivos.
El proceso de hidratación de nuestro cutis, adecuado es el siguiente:
• Es aconsejable comenzar el proceso en la mañana, cuando recién nos levantamos. Es donde acumulamos mayormente el tener graso del rostro.
• Lavar con abundante agua limpia, para sacar todo tipo de exceso de gratitud.
• Secar de forma delicada y dejando húmeda nuestra piel, para la colocación del producto hidratante.
• El empleo de cremas hidratantes con movimientos circulares. Esto permite una mejor absorción en nuestra piel. Dejar reposar por un corto periodo (5 a 10 minutos).
Otras de las formas de hidratación, es mediante la utilización de verduras frescas. Pero ello, vamos a elaborar un producto totalmente casero y económico.
Solo debemos contar con un poco de agua de rosas (preferentemente, sino podemos utilizar agua mineral), unas cucharadas de miel liquida, dos cucharadas colmadas de harina de arroz y unas rodajas de verdura fresca: pepino, tomate o cualquier otro que cumpla con los requisitos. Por ultimo, vamos a mezclar todo hasta crear una sustancia homogénea, para luego empapar las rodajas y aplicar sobre el cutis facial. Siempre y cuando repitiendo los mismo pasos explicados con anterioridad.
Seguramente siguiendo estos sencillos pasos y aplicando cualquiera de las dos técnicas, vamos a tener unos excelentes resultados al momento de hidratar nuestro cutis.
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